El pasado domingo, el primero de este adviento que acabamos de comenzar, el padre José Luis, durante su homilía, tomó prestada la peculiar historia que le sucedió a este sacerdote navarro, párroco de la parroquia de San Lorenzo. El evangelio nos hablaba de estar en vela, pues no conocemos el momento en que va a llegar el Señor a nuestras vidas. Después de simplificar el mensaje para los más pequeños nos habló de este sacerdote de Pamplona, quien tras publicar en internet su reflexión sobre la Navidad que viviremos este año, marcada por el Coronavirus, recibió una llamada telefónica inesperada. José Luis nos explicaba que, si no hubiese tenido el móvil cerca y encendido, jamás hubiese descubierto quién respondería tras aquella llamada entrante de número desconocido.
El Propio Javier Leoz compartía en redes su experiencia:
“Hoy sábado me ha ocurrido algo verdaderamente sorprendente y os lo narro: estaba a las 16:30h en la casa parroquial de San Lorenzo cuando como “llamada privada” ha sonado el móvil. Cual ha sido mi sorpresa cuando al otro lado estaba ni más ni menos que el Papa Francisco para decirme que había llegado a sus manos un texto que escribí hace unos días titulado “¿Qué no habrá Navidad?” y para reiterarme lo complacido que se había sentido con la lectura del mismo; que estas navidades serán más purificadas y me ha manifestado cómo nos han ido robando el espíritu cristiano de esos días. Como final que os transmitiese a todos los parroquianos y navarros sus bendiciones. Le he dicho que rezaremos muy especialmente por él en todas misas y que se anime a venir a España y al Castillo de Javier. Casi se me sale el corazón del pecho!!! Me ha comentado: tranquilo, tengo por costumbre, como obispo que soy de Roma, llamar a los sacerdotes. Increíble pero cierto!!!“
A continuación os dejamos el texto que habla de la Navidad de 2020, esa a la que el padre Leoz miraba con esperanza, esa para la que empezamos a prepararnos este domingo 29, y que tanto conmovió al propio Papa Francisco:
¿QUÉ NO HABRÁ NAVIDAD?
¡Claro que sí!
Más silenciosa y con más profundidad
Más parecida a la primera en la que Jesús nació en soledad.
Sin muchas luces en la tierra
pero con la de la estrella de Belén
destellando rutas de vida en su inmensidad
Sin cortejos reales colosales
pero con la humildad de sentirnos
pastores y zagales buscando la Verdad.
Sin grandes mesas y con amargas ausencias
pero con la presencia de un Dios que todo lo llenará
¿QUÉ NO HABRÁ NAVIDAD?
¡Claro que sí!
Sin las calles a rebosar
pero con el corazón enardecido
por el que está por llegar
Sin ruidos ni verbenas,
reclamos ni estampidas…
pero viviendo el Misterio sin miedo
al “covid-herodes” que pretende
quitarnos hasta el sueño de esperar.
Habrá Navidad porque DIOS está de nuestro lado
y comparte, como Cristo lo hizo en un pesebre,
nuestra pobreza, prueba, llanto, angustia y orfandad.
Habrá Navidad porque necesitamos
una luz divina en medio de tanta oscuridad.
Covid19 nunca podrá llegar al corazón ni al alma
de los que en el cielo ponen su esperanza y su alto ideal
!HABRÁ NAVIDAD!
¡CANTAREMOS VILLANCICOS!
¡DIOS NACERÁ Y NOS TRAERÁ LIBERTAD!